Este escándalo ha costado la renuncia de dos ministras en Perú.
El gobierno, Congreso y la Fiscalía de Perú se encuentran investigando la vacuna a escondidas con «dósis de cortesía» de la farmacéutica china Sinopharm a funcionarios de alto rango.
El hecho se conoció después de confirmarse este fin de semana que el expresidente Martín Vizcarra recibió a escondidas una vacuna contra la covid-19 el pasado octubre, cuando todavía estaba en el poder.
Una de las últimas figuras políticas afectadas por el escándalo ha sido la canciller, Elizabeth Astete, quien la noche del domingo dimitió tras admitir que se vacunó con la primera dosis el pasado 22 de enero sin avisar al actual presidente, Francisco Sagasti.
Astete se vacunó con una dosis que llegó en septiembre junto al cargamento destinado a un ensayo clínico de esa farmacéutica. Fue “una decisión equivocada que no medí en su momento”, escribió la ahora exministra en un comunicado que compartió a Twitter.
En consecuencia Astete presentó su renuncia, así como del viceministro de Salud Pública, Luis Suárez, después de que la presidenta del Consejo de Ministros, Violeta Bermúdez, exigiera saber quiénes se habían inmunizado de forma irregular con esas dosis.
Perú es uno de los países latinoamericanos más golpeados por la pandemia de coronavirus, con más de 40.000 muertos y más de 1,24 millones de casos de coronavirus y aunque todavía no está claro cuándo será vacunado el grueso de la población, resulta que muchos políticos ya han sido vacunados, lo que desató la indignación popular.