En total son más de 600 familias que han resultados damnificadas en la ola invernal en el Magdalena.
Tras las fuertes lluvias registradas en las últimos días en el Magdalena las afectaciones empezaron a notarse en las zonas rurales del departamento. En el municipio de Remolino las inundaciones han dañado las vías de comunicación entre los corregimientos y la cabecera municipal.
Además, se han visto damnificados las extensiones de tierra de pequeños agricultores y ganaderos de la zona rural se encuentran llenas de agua, siendo las perdidas incalculables.
Hasta el momento 600 familias han resultado damnificadas por las inundaciones, mientras que 500 hectáreas de cultivo se encuentran bajo del agua.
El alcalde Carlos Vargas Fontalvo solicitó la intervención urgente del Gobierno Nacional y Departamental para atender la emergencia que golpea a su municipio.
De acuerdo con la información uno de los puntos más críticos es el sector conocido como Matecaña, en donde el daño es mas evidente y los pobladores claman ayuda urgente.
“Ya que ahora es el momento, pues el invierno no ha comenzado y ya se registran algunos daños. Siempre se toma la información sobre lo que aquí ocurre y no pasa nada”, indicó Jonny Silva habitante del sector.
La población también hacen un llamado a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo, Corpamag y Cormagdalena para que tomen cartas en el asunto.
Así como Matecaña existen otros puntos críticos en el recorrido que hace el río Magdalena por el municipio de Remolino. Las inundaciones serán eminentes y se vería afectado los cultivos de pancoger y la ganadería que son el sustento de varias familias de la región.
Aunque no ha comenzado el invierno, como se ha pronosticado, ya se siente la preocupación en las comunidades y el río ha ido erosionando en ciertos sectores.