Los pobladores hacen un llamado al Gobierno Nacional.
El desbordamiento del río Magdalena mantiene en estado de alerta a las poblaciones aledañas a este gran afluente, debido a los riesgos latentes de incomunicación terrestre por el estado en el que se encuentran las vías principales.
Ese es el caso de cuatro municipios magdalenenses, los cuales están sufriendo las inclemencias del invierno por un boquete de cerca de cinco metros de ancho formado en la Vía de la Prosperidad, por el que los vehículos ya no pueden transitar. Por esto, las comunidades se han visto en la obligación de hacer uso de canoas para poder trasladarse de un lado a otro.
La alerta por incomunicación la tienen actualmente Tenerife, Pivijay, Guaimaral, Molineros, entre otros, que sólo cuentan con la citada carretera para dirigirse por tierra hacia Santa Marta o Barranquilla.
Es por esto que, una vez más, los pobladores de esa zona del departamento hacen un llamado al Gobierno Nacional para que les brinden respuestas urgentes ante la emergencia que hoy atraviesa.