El general William Salamanca no es ajeno a la política. Su papá, Otoniel Salamanca, era un reconocido dirigente en Úmbita, Boyacá, su ciudad natal. Además, en su paso como enlace del Congreso sembró buenas amistades.
El presidente de la República, Gustavo Petro, en compañía del ministro de Defensa, Iván Velásquez y de la vicepresidenta, Francia Márquez, lideró la ceremonia de reconocimiento del nuevo director de la Policía Nacional, general William Salamanca.
“Por disposición del Gobierno nacional fue designado el mayor general William Salamanca como nuevo director de la Policía Nacional, y todos le obedecerán. Tome usted el mando de la Policía”, fueron las palabras del primer mandatario, tal como lo revela la Revista Semana.
En el decreto por el cual se designó a Salamanca como nuevo director de la Policía Nacional, el Gobierno también debió ordenar su reintegro como miembro activo de la Policía, teniendo en cuenta que Salamanca ya se había retirado.
En la ceremonia también estuvo presente el director de la Policía saliente, el general Henry Sanabria, a quien el presidente de la República, Gustavo Petro, le impuso varias medallas en reconocimiento a su labor en la institución.
En su primer discurso como director de la Policía, el general William Salamanca inició haciéndole un reconocimiento a su señora madre, Ana de Jesús.
“Hoy en esta fecha especial y antesala a la celebración del día de la madre, les presento a mi mamá, quien hace 40 años me trajo a esta escuela de cadetes para servirle a mi país”, afirmó Salamanca mientras su señora madre se abrazaba con el presidente Petro y la vicepresidenta Márquez.
Precisamente Salamanca señaló que “el próximo domingo tendremos el primer gran reto, y es lograr que el Día de la Madre deje de ser el más violento en el país”.
De igual modo, el general Salamanca enfatizó que en su administración se enfrentarán “las distintas manifestaciones del multicrimen, en especial el hurto a personas, residencias, empresas y vehículos, el homicidio, la piratería terrestre, la extorsión, el secuestro, el narcotráfico, el contrabando, la extracción ilícita de minerales, la trata de personas, la migración irregular, la corrupción, el lavado de activos, el abigeato y la violencia intrafamiliar, al igual que los comportamientos contrarios a la convivencia”.