Ampliar los territorios de los pueblos indígenas, sanear los resguardos y comprar tierras para que a través de una red de cooperativas de indígenas y campesinos puedan cultivarlas y garantizar la seguridad y soberanía alimentaria del Departamento.
Esta fue la propuesta que hizo el gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, durante la mesa de socialización del Plan de Desarrollo Departamental Magdalena Renace 2020-2023, que contó con la participación de representantes de los pueblos indígenas de las etnias arhuaca, wiwa, kogui, chimila y wayuu.
“Ojalá podamos con los pueblos indígenas en sus tierras o en las tierras con campesinos desarrollar estas alianzas cooperativas para producir café, cacao, miel o panela y todo lo que necesitamos para la canasta básica”, expresó Caicedo.
También propuso promover un turismo cultural y de naturaleza sostenible que permita que las comunidades indígenas y campesinas puedan obtener ingresos sin que se deteriore su forma de vida. “No de manera masiva, sino más selectiva, más regulada para que pueda generar una nueva cadena de valor y de ingresos, para que las artesanías se produzcan con calidad y se vendan a los turistas o se exporten y los productos que los pueblos indígenas producen también se puedan vender”, dijo el mandatario.
Caicedo aseguró que el Plan de Desarrollo Departamental servirá como hoja de ruta para los próximos cuatro años, pero también hay que trazar una agenda estratégica para los próximos 30.
“Tenemos que construir una sociedad más equitativa, más justa, más igualitaria, en paz, en la que se respeten las distintas ideas y diversidad cultural para que podamos enfrentar unidos la pandemia de ahora y la de la corrupción, la pobreza, el abandono histórico y enfrentar el futuro con optimismo, trabajando en alianzas estratégicas entre campesinos, indígenas, afros, los sectores público y privado para construir la gobernanza que necesitamos para salir adelante”, concluyó el mandatario.