Un saldo de 7 personas fallecidas, 175 ciudadanos y 114 uniformados heridos, dejó las protestas desatadas a raíz del caso de Javier Ordóñez, quien murió tras una fatal agresión de dos agentes de la Policía Metropolitana de Bogotá.
Todas las vícitimas mortales eran jóvenes y según el reporte de la Alcaldía murieron por el uso indiscriminado de armas de fuego por parte de la Policía de Bogotá.
Uno de los fallecidos en el municipio de Soacha es Cristian Andrés Hurtado, de 31 años. Otro de los decesos reportados fue el de Lorwuan Estiben Mendoza de 26 años de edad, y la tercera persona es un hombre, cuya identidad no se conoce, ya que fue encontrado sin documentación.
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, asegura que hubo uso indiscriminado de armas de fuego contra la población civil, especialmente contra los jóvenes, por parte de algunos miembros de la fuerza pública.
Funcionarios de la Alcaldía y la Policía Metropolitana de Bogotá buscarán imágenes en las cámaras de seguridad para documentar los hechos y ponerlos en conocimiento de las autoridades, especialmente de la Procuraduría, a quien le pedirá que asuma las investigaciones por abuso.