Un grupo significativo de familias de Fundación Magdalena se encuentran desesperados y viviendo en condiciones infrahumanas, luego que hace unos meses fueron desalojados donde se encontraban residiendo debido a que correspondía aun predio de propiedad privada.
Ante dicha situación, la Gobernación del Magdalena y la Alcaldía del municipio en ese entonces, reubicó a las familias en un predio estatal. Allí con los recursos posibles han edificado sus casas a base de plástico, madera y barro, sin embargo no ha logrado mantener la calidad de vida que tenían meses atrás.
«Necesitamos ayudas, prácticamente nos tienen abandonados. No hay alcantarillado y además mucho mosquito. Dentro de nuestras familias hay niños y adultos mayores».
De manera respetuosa, esta comunidad extiende un llamado al gobierno nacional, departamental y municipal, para que los asistan, teniendo en cuenta que lo perdieron todo con el desalojó que sufrieron. Agradecidos siempre con el espacio que les brindaron, pero hoy están carentes de conexiones directas con los servicios públicos y de recursos para vivir dignamente.