El expresidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, advirtió este lunes a través de su cuenta en X sobre un supuesto plan para atentar contra su vida, según información proporcionada por “inteligencia internacional”. En su declaración, Uribe también cuestionó al Gobierno por desviar su atención de la gravedad del reciente ataque contra el senador Miguel Uribe Turbay, miembro de su partido, Centro Democrático, y precandidato presidencial para las elecciones de 2026.
“En medio de la lucha por la vida de Miguel, el Gobierno se enfoca en otros asuntos. Desde su interior nos piden acuerdos para evitar nuevas tragedias, mientras la inteligencia internacional me alerta de un nuevo atentado en mi contra”, expresó Uribe, quien lideró el país entre 2002 y 2010.
La denuncia del exmandatario se produce en un contexto de creciente tensión política tras el atentado contra el senador Uribe Turbay, ocurrido el pasado sábado durante un evento de campaña en el occidente de Bogotá. Este ataque ha generado una ola de indignación y ha reavivado el debate sobre la seguridad de las figuras políticas en el inicio de la carrera electoral para 2026.
Álvaro Uribe, una de las figuras más polarizantes y protegidas de Colombia, ha enfrentado múltiples atentados a lo largo de su carrera. Uno de los más recordados ocurrió el 14 de abril de 2002 en Barranquilla, cuando un autobús bomba explotó al paso de su vehículo blindado durante su campaña presidencial. Aunque Uribe salió ileso, el ataque, atribuido a las FARC, dejó un saldo de cuatro muertos y 22 heridos.
Ese mismo año, durante su posesión presidencial el 7 de agosto, la guerrilla lanzó proyectiles contra la Casa de Nariño y detonó explosivos en Bogotá, causando 14 fallecidos y 59 heridos. En 2005, las autoridades desactivaron a última hora un plan para atentar contra Uribe en Neiva, donde se encontraron explosivos cerca del aeropuerto local.
El expresidente no proporcionó información específica sobre la fuente o los detalles de la supuesta amenaza actual, pero su declaración ha intensificado los llamados de diversos sectores políticos para que el Gobierno fortalezca las medidas de seguridad y garantice un entorno seguro para el ejercicio democrático.
Por su parte, el senador Miguel Uribe Turbay, de 39 años y sin parentesco con el expresidente, permanece en estado crítico en la Fundación Santa Fe de Bogotá. Según el último informe médico, su condición es delicada y ha mostrado poca respuesta a los tratamientos. El responsable del ataque, un adolescente, fue capturado y enfrentará una audiencia judicial este lunes, según la Fiscalía.
El atentado contra el senador y la advertencia de Uribe han puesto en el centro del debate la seguridad de los líderes políticos en un país que aún enfrenta desafíos de violencia, a medida que se acercan las elecciones legislativas y presidenciales de 2026.