Las elecciones atípicas para escoger al nuevo gobernador del Magdalena se desarrollaron este domingo en medio de una notoria falta de participación ciudadana. En gran parte de los puestos de votación de Santa Marta se observó una baja afluencia de electores, lo que contrastó con la eficiente organización de la Registraduría Nacional, entidad que fue destacada por la rapidez y claridad con la que entregó los resultados oficiales, dejando sin argumentos a quienes habían cuestionado su desempeño.
Con el 100% de las mesas procesadas —2.924 en total—, se confirmó que solo 341.782 personas acudieron a las urnas, pese a que el censo electoral estaba compuesto por 1.094.215 sufragantes. Esto refleja una participación del 31,23%, mientras que la abstención alcanzó un 68,77%, una de las cifras más altas registradas recientemente en el departamento.
En cuanto a los resultados, la abogada María Margarita Guerra Zúñiga obtuvo el 56,05% de la votación, con 188.722 votos. En segundo lugar se ubicó Rafael Emilio Noya García, quien obtuvo el 36,91% equivalente a 124.291 sufragios. Más abajo quedaron Miguel Martínez Olano, con 16.433 votos, y Luis Santana Galeth, quien sumó apenas 2.247 votos, correspondientes al 0,66%. La Registraduría también reportó 4.964 votos en blanco, 3.242 nulos y 1.883 no marcados.
La jornada se caracterizó igualmente por la poca presencia de jóvenes y la ausencia de las largas filas que normalmente se observan en procesos electorales anteriores. Según la Registraduría, el votante tardó en promedio dos minutos en ejercer su derecho, lo que permitió una dinámica ágil y sin contratiempos. Camilo George Díaz, secretario del Interior de Santa Marta, aseguró que todo se desarrolló conforme a lo establecido y que no hubo impedimentos para que la ciudadanía votara con normalidad.
Las autoridades municipales destacaron la labor de los organismos de seguridad, que permanecieron atentos para evitar cualquier alteración del orden público. Por su parte, la Secretaría de Movilidad, bajo la dirección de Fidel Castro Tapia, reportó un balance positivo en el control del tráfico vehicular antes, durante y después de la jornada. Se pusieron en marcha operativos contra la conducción bajo efectos del alcohol, la regulación de las chivas hasta la 1:00 a. m. y la supervisión del cumplimiento de rutas del transporte público para facilitar el desplazamiento hacia los puestos de votación.
No obstante, la jornada también dejó algunos inconvenientes en los colegios habilitados como sedes electorales. En instituciones educativas como la IED Alfonso López y el Instituto Magdalena, varios periodistas denunciaron restricciones para grabar o registrar imágenes, pese a que el decreto 1702 de 2023 permite el trabajo de los medios dentro de los puestos de votación con previa coordinación. En el Instituto Magdalena se presentaron además quejas por puertas cerradas en algunos salones con mesas de votación, situación que generó incomodidad entre electores que consideraron que esto afectaba la transparencia del proceso.
A pesar de estos hechos aislados, la jornada transcurrió en calma, sin incidentes de violencia ni alteraciones del orden público. En diferentes sectores también se cumplió la ley seca establecida como medida preventiva, garantizando un ambiente de normalidad en el desarrollo de los comicios.







