Con una emotiva jornada cargada de gratitud y reconocimiento, la Cruz Roja Colombiana Seccional Magdalena conmemoró los 63 años de fundación del voluntariado de las Damas Grises, una agrupación femenina que ha sido ejemplo de servicio, entrega y humanidad en Santa Marta.
Desde su creación en 1962, las Damas Grises han sido parte fundamental de la estructura de voluntariado de la Cruz Roja. Mujeres con vocación solidaria, ética intachable y profundo compromiso social que dedican su tiempo a servir a los demás, en especial a comunidades vulnerables, adultos mayores y personas afectadas por emergencias.
En la capital del Magdalena este grupo ha mantenido una presencia constante en los barrios más necesitados, desarrollando jornadas de salud, programas de educación comunitaria, talleres de empoderamiento para mujeres cabeza de hogar y visitas solidarias a hogares geriátricos.
Durante la conmemoración, una de las figuras más aplaudidas fue Cecilia Bacca de Mejía, símbolo de constancia, liderazgo y vocación desinteresada. Con 40 años al servicio del voluntariado, ha sido testigo de la evolución de la Cruz Roja en Santa Marta y ha formado a generaciones de nuevas Damas Grises. Su legado es admirado por compañeras que la reconocen como una mujer de temple, sensibilidad y entrega sin límites.
Martha Inés Pertuz Ávila, coordinadora de Damas Grises expresó su gratitud y orgullo por liderar este voluntariado. “Desde que me vinculé a las Damas Grises he sentido un compromiso hacia la labor humanitaria, lo cual se ha acrecentado al asumir la coordinación”, afirmó.
También fue reconocida Beatriz Meléndez de Martínez, con 35 años de trayectoria, quien destacó la importancia del trabajo en salud preventiva. “Lo que más me apasionó fue la toma de citologías. Me formé en varias ciudades y estuve 15 años prestando ese servicio. Saber que ayudé a tantas mujeres a tiempo es algo que me llena el alma”, dijo emocionada.
Alcira Enríquez, excoordinadora con 18 años de voluntariado, recordó que el trabajo de las Damas Grises trasciende la ayuda material. “En cada jornada buscamos fortalecer también la parte emocional y espiritual de las personas, sobre todo de mujeres que han tenido que salir adelante solas. No todas tienen la misma fortaleza, y ahí estamos nosotras para acompañarlas y apoyarlas”, expresó.
En este aniversario número 63, el mensaje de la agrupación es claro: continuar fortaleciendo el voluntariado femenino en Santa Marta y aportar, desde cada acción, a la construcción de una sociedad más solidaria y resilientes. Mujeres como Cecilia Bacca de Mejía representan esa huella imborrable de humanidad que deja cada Dama Gris en su camino.
