En una operación conjunta, autoridades colombianas decomisaron más de cinco toneladas de cocaína en el mar Caribe y el puerto de Cartagena, con destino a países europeos como Bélgica y España. La droga fue encontrada oculta en lanchas rápidas, contenedores de exportación y un velero extranjero.
La Armada de Colombia y la Fuerza Aérea, con apoyo del Servicio Nacional Aeronaval de Panamá y el Comando Sur de Estados Unidos, coordinaron la operación que frustró las rutas de las redes narcotraficantes. El valor estimado del cargamento supera los 184 millones de dólares.
En altamar se interceptaron tres embarcaciones “go fast” con un total de 5.481 kilos de cocaína, entre paquetes recuperados tras el abandono de una lancha. En el puerto, en contenedores que transportaban café, frutas y otros productos, se hallaron más de 2,9 toneladas de droga, incluyendo 400 kilos en un velero belga y 232 kilos en un buque de Singapur.
La sofisticación de los métodos de ocultamiento refleja la capacidad logística de las organizaciones criminales, que aprovechan cargas legales para evadir controles. Además, en La Boquilla, Cartagena, se allanó un apartamento donde se encontró un centro de acopio con 218 kilos de cocaína listos para distribución.
Las autoridades mantienen patrullajes intensivos y avanzan en la investigación para capturar a los responsables. El presidente Gustavo Petro confirmó la incautación a través de sus redes sociales, destacando la colaboración internacional que hizo posible este golpe al narcotráfico.







