Un oscuro episodio de violencia sacudió a los habitantes de la localidad de San Cristóbal, en el sur de Bogotá, durante la noche del pasado 22 de septiembre. En plena vía pública, un adolescente de 16 años asesinó con un arma blanca a Joseph David Zapata, un joven de apenas 20 años de edad, en un hecho que, según las primeras versiones, estaría motivado por un conflicto sentimental.
La tragedia ocurrió en la carrera 2 con calle 8 sur, en el barrio La María, donde Joseph David compartía un momento con su actual pareja sentimental. De acuerdo con los testimonios recogidos por las autoridades, el adolescente agresor habría llegado hasta el lugar al verlos juntos, reconociendo a la joven como su expareja. Movido por los celos y la ira, se acercó con actitud confrontativa, lo que derivó en una fuerte discusión.
La confrontación verbal escaló rápidamente a la violencia. En medio del altercado, el menor de edad sacó un cuchillo y le propinó una puñalada en el pecho a Joseph David. La herida resultó ser mortal, y a pesar de que algunas personas intentaron auxiliarlo, el joven perdió la vida en el mismo sitio, sin dar tiempo a que llegara ayuda médica.
El adolescente, señalado como responsable del ataque, fue retenido poco después y puesto a disposición de las autoridades. El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación acudió al lugar para realizar la inspección del cadáver e iniciar las labores judiciales correspondientes. La investigación busca esclarecer todos los detalles del caso y determinar el grado de responsabilidad penal del menor, quien enfrentará un proceso especial por su condición de adolescente.
Este crimen no solo dejó consternados a los familiares y amigos de la víctima, sino que también avivó el debate sobre la creciente ola de homicidios en la capital. Según la Secretaría Distrital de Seguridad, Justicia y Convivencia, Bogotá enfrenta un preocupante aumento en los índices de violencia: entre enero y agosto de 2025, los homicidios subieron un 6 % respecto al mismo periodo de 2024, con un promedio de tres asesinatos diarios.
El panorama es aún más alarmante en localidades como San Cristóbal, donde el incremento alcanza un 75,8 %, seguida por Rafael Uribe Uribe (62,5 %) y Puente Aranda (35,3 %). En paralelo, cifras de la Policía Metropolitana muestran que, con corte al 13 de septiembre, delitos como la violencia intrafamiliar han aumentado en un 22 %, mientras que los casos de secuestro se dispararon en un 200 %, reflejando un deterioro general de la seguridad en la ciudad.
Ante esta realidad, voces del Concejo de Bogotá han reiterado sus críticas a la administración distrital. El cabildante Julián Espinosa recordó que el plan de desarrollo establecía la meta de reducir en un 8 % los homicidios, pero la tendencia es contraria. “Ellos se comprometieron a hacer una disminución del 8 % en los homicidios y, al contrario, el homicidio tiende a aumentar. Desafortunadamente, la Secretaría de Seguridad no ha hecho lo pertinente para tratar de contener la cadena de homicidios”, afirmó el concejal.
Mientras avanza la investigación judicial, el asesinato de Joseph David Zapata queda como un doloroso reflejo de cómo los conflictos personales y emocionales pueden desencadenar tragedias irreparables, al tiempo que subraya la urgencia de medidas más efectivas para frenar la violencia que golpea con fuerza a la capital del país.