La conmemoración anual de la matanza estudiantil de Tlatelolco (2 de octubre de 1968) degeneró este año en serios enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad en la Ciudad de México, cuando la marcha avanzaba hacia el Zócalo capitalino. Lo que comenzó como un homenaje pacífico terminó envuelto en fuego, gases lacrimógenos, violencia y daños materiales.
Según datos oficiales y reportes de prensa, la movilización congregó a más de 10.000 personas, de las cuales un grupo estimado de 300 encapuchados rompió el carácter pacífico de la marcha lanzando piedras, bombas molotov y provocando desórdenes, especialmente al llegar al Zócalo. La policía respondió con medidas de contención, gas lacrimógeno y despliegue de unidades antidisturbios.
El saldo fue grave: 94 policías resultaron heridos, de ellos tres en estado grave, según la jefa de gobierno de la capital, Clara Brugada. Entre los manifestantes hubo al menos 29 heridos civiles, e incluso periodistas denunciaron agresiones y daños a su equipo durante los altercados.
Las autoridades reportaron también 29 civiles detenidos y daños valuados en cerca de 4 millones de pesos mexicanos (aproximadamente 220.000 dólares). Algunos comercios y edificios en la ruta de la marcha sufrieron vandalismo y saqueos, mientras que el Centro Cultural Universitario Tlatelolco fue objeto de ataques contra sus ventanas y fachadas, provocando la indignación de la UNAM.
Funcionarios capitalinos destacaron que la marcha fue protegida por 500 agentes desplegados, y que cuerpos policiales siguieron “protocolos de contención” frente a los actos violentos. También señalaron que los enfrentamientos más intensos se concentraron en el Zócalo, donde un dispositivo policial fue embestido por manifestantes agresivos.
Desde el ámbito académico, la UNAM calificó los ataques contra sus instalaciones como una afrenta a la memoria histórica del movimiento estudiantil. Al mismo tiempo, autoridades locales insistieron en que su actuación buscó garantizar el derecho a la protesta pacífica y la protección de los espacios públicos.