De acuerdo con el coronel Javier Duarte Reyes, comandante del Departamento de Policía Magdalena, seis de los vehículos recuperados presentaban sistemas de identificación regrabados, una modalidad utilizada por las redes criminales para intentar evadir los controles de las autoridades. Estos vehículos habían sido alterados en su sistema de identificación para posteriormente ser comercializados de manera ilegal.
Entre los casos detectados, se estableció que tres de los automotores fueron hurtados mediante la modalidad de halado, en eventos registrados en los departamentos del Atlántico, Antioquia y en la ciudad de Santa Marta. Según las investigaciones, los delincuentes aprovechan descuidos de los propietarios para sustraer los vehículos sin ejercer violencia.
Por otro lado, otros tres automotores fueron robados bajo la modalidad de atraco, en hechos ocurridos en Antioquia, Meta y La Guajira. En estos casos, los delincuentes intimidaron a las víctimas con armas de fuego para despojarlas de sus vehículos, hechos que son materia de investigación por parte de las autoridades competentes.
Los dos vehículos restantes eran requeridos judicialmente por procesos de embargo, situación que fue detectada durante los operativos de verificación. Estos automotores fueron dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación, en el marco de procesos judiciales adelantados por el delito de falsedad marcaría.