Venezuela alerta sobre cinco cazas de Estados Unidos en sus costas y califica la movilización militar de Donald Trump como amenaza y provocación
El gobierno de Venezuela denunció este jueves que cinco cazas estadounidenses se aproximaron a sus costas, en el marco de la operación militar desplegada por Washington en el Caribe bajo el argumento de la lucha contra el narcotráfico.
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, aseguró a través de la televisión estatal que el sistema de defensa aérea del país “detectó más de cinco vectores”, en referencia a los aviones de combate que se acercaron a aguas venezolanas. “El imperialismo norteamericano se ha atrevido a acercarse a las costas venezolanas. Los estamos viendo. No nos intimida la presencia de estos vectores”, manifestó Padrino.
Estados Unidos mantiene desde hace casi un mes un operativo militar en el Caribe, que incluye el despliegue de 10 cazas F-35 en Puerto Rico y al menos ocho buques de guerra. Según la Casa Blanca, estas maniobras se enmarcan en un plan contra el narcotráfico regional, aunque Caracas insiste en que se trata de un asedio militar y una provocación directa contra su seguridad nacional.
El presidente Nicolás Maduro calificó la operación como un intento de “amenaza y desestabilización”, denunciando ante la comunidad internacional que “no deja de ser una provocación pero también una amenaza a nuestra seguridad nacional”.
El Ministerio de Defensa venezolano también informó que en paralelo sus fuerzas destruyeron campamentos de drogas operados por guerrillas colombianas dentro del territorio nacional. En contraste, Washington aseguró que durante el operativo sus tropas han destruido al menos tres embarcaciones que presuntamente transportaban drogas y estaban vinculadas con el Tren de Aragua y otros grupos ilegales, aunque el gobierno estadounidense no presentó pruebas concluyentes.
En un giro político, el presidente Donald Trump declaró ante el Congreso que Estados Unidos está formalmente involucrado en un “conflicto armado” contra los carteles de la droga, a cuyos miembros calificó de “combatientes ilegales”, según reveló el diario The New York Times.
Para Caracas, estas medidas forman parte de un plan de la Casa Blanca que busca utilizar el narcotráfico como pretexto para forzar la caída de Maduro y, eventualmente, controlar las mayores reservas de petróleo del mundo, que pertenecen a Venezuela.