Durante las recientes jornadas de manifestación en Bogotá se han registrado incidentes que han generado preocupación en las autoridades y en la ciudadanía. La situación más crítica se vivió en la carrera Séptima con calle 72, en donde un grupo de manifestantes atacó con objetos contundentes el CAI de la Policía ubicado en la avenida Chile, ocasionando daños en su infraestructura.
El bloqueo de esta zona estratégica de la capital provocó graves afectaciones en la movilidad, lo que obligó a las autoridades distritales a suspender la etapa de diálogo que se venía adelantando. “A esta hora en el lugar se reportan acciones que perturban la sana convivencia, intimidan y provocan, lanzando objetos contundentes. Se suspende etapa de diálogo”, informó la Secretaría de Gobierno a través de un comunicado.
El Distrito rechazó enérgicamente los actos vandálicos, argumentando que este tipo de conductas deslegitiman el carácter pacífico de las movilizaciones. “Rechazamos estas actuaciones que afectan e intimidan a quienes no hacen parte de las protestas y que distorsionan el objetivo legítimo de quienes se manifiestan de manera pacífica”, puntualizó la entidad.
Para controlar la situación, unidades del Escuadrón Móvil Antidisturbios (UNDMO) intervinieron en el lugar con el fin de dispersar a los manifestantes y recuperar el orden. Hacia la tarde, las autoridades lograron restablecer la movilidad en el corredor vial de la carrera Séptima con calle 72 en ambos sentidos, aunque grupos de manifestantes se desplazaron hacia la calle 73 con carrera Novena, en dirección oriente–occidente.
En el transcurso de la jornada también se reportaron la quema de bengalas, uso de equipos de sonido, pintadas en edificios cercanos y hasta un altercado entre algunos asistentes, que debió ser atendido por personal de mediación en terreno. Al cierre de la tarde, varios manifestantes permanecían concentrados frente a la sede de la ANDI, donde el ambiente seguía tenso pese al despliegue de las autoridades para mantener el control.